Según el libro de texto la filosofía es una actividad que consiste en razonar y reflexionar sobre conceptos e ideas cuyo significado, comúnmente se sobrentiende o se da por descontado. Pero… ¿todos estamos preparados para razonar y reflexionar sobre las respuestas que nos pueden deparar preguntas existenciales o racionales como quiénes somos, de dónde venimos, qué es la verdad y qué es la mentira, por qué lo bueno es bueno y lo malo, malo?, entre otras. Lo desconocido puede resultar tentador o aterrador. ‘’Cada persona es un mundo’’ y cada ‘’mundo’’ está movido por unas inquietudes, expectativas y necesidades distintas. Las necesidades tratan de satisfacer aspectos de la vida del ser humano. Se mueven por las condiciones de vida y los avances de la sociedad. Por eso, las necesidades cambian según el lugar donde te encuentres. Lo que para unos supone un duro trabajo como tener agua potable, para otros es algo tan simple como abrir un grifo y ver agua y agua caer incesantemente. Esto es una muestra de las desigualdades existentes. Para las sociedades subdesarrolladas es más importante intentar cubrir sus necesidades básicas para subsistir que preguntarse interrogantes filosóficos. Por esto, podemos diferenciar entre dos tipos de personas. Unas personas más ‘’valientes’’ a las que no le aterran lo que puedan descubrir, con las necesidades básicas cubiertas, inconformistas, movidas por ansias de conocimiento y admiración, de las que florecen preguntas que necesitan ser respondidas. Por otra parte, otro tipo de personas que viven ajenas a saber las respuesta de interrogantes filosóficos como estos por miedo a una decepción de lo que puedan llegar a conocer o simplemente porque la filosofía está en una clasificación posterior a la de las necesidades básicas que no pueden llegar a saciar fácilmente. Así que, respondiendo a la pregunta inicial ¿necesitamos hoy día un poco de filosofía? Yo creo que depende, depende del ‘’mundo’’ que sea. Todos no necesitamos las mismas cosas para ser feliz y puesto que todas las necesidades no son las mismas, la filosofía considero que es una necesidad secundaria que solo unos pocos son valientes de poder llegar a planteársela.
La Filosofía es, en la actualidad, una ciencia indispensable para el ser humano, que busca encontrar respuestas a las cuestiones que se plantea sobre el mundo que le rodea, siempre que no sea un ignorante, ya que entonces, al creer que no carece de ningún conocimiento, no llegará a sorprenderse del mundo y por tanto, a poseer ese afán constante de investigar del que dispone un filósofo. La filosofía no surge para serle útil a otra cosa ni tampoco por antojo, sino que es completamente inevitable, pues es imposible no hacerse preguntas ya que la naturaleza de nuestro intelecto es pensar, ir más allá de lo parcial, de lo que se nos cuenta, de lo que vivimos y conocemos. De hecho, filosofar es, según Ortega y Gasset, buscar al mundo su integridad. Que la Filosofía sea el conocimiento de todo lo existente, implica para el filósofo no partir de creencias previas, de no dar nada por sabido anticipadamente. ¿Significa esto entonces que es imposible combinar fe y racionalismo? Bajo mi punto de vista, es una tarea complicada, pero no imposible. Pienso que en el momento en el que el racionalismo plantee algo a lo que no se le encuentre un sentido lógico, el hombre busca sustentarse en la fe. Tal vez, al ser la Filosofía algo improbable que quizás no tenga éxito por ser difícil de resolver, se llegue a la conclusión de que no es primariamente necesaria, si bien no sólo nos ayuda a cubrir nuestras inquietudes y curiosidad, sino también a crear una opinión propia y a la hora de la toma de decisiones, acto que se debe llevar a cabo a través del análisis de la situación, observándola desde un punto de vista objetivo, es decir, distanciándonos de ella. Existen, sin embargo, personas que quizás no llegarían a cuestionarse la necesidad de la Filosofía, tal vez por miedo a que algo llegue a superarles. Es por esta razón por la que algunos individuos prefieren a veces vivir en la ignorancia, atrapados por la rutina y la normalidad, antes que arriesgarse a practicar la Filosofía, que al tener un componente de audacia, puede plantearnos aspectos un tanto desagradables. En conclusión, y tras barajar dos posibles puntos de vista, defiendo la gran relevancia de la Filosofía en nuestras vidas, no sólo a nivel académico sino también como modo de vida, en el que debe existir una coherencia entre el pensar y el vivir. A veces, las preguntas que nos planteamos sobre el mundo en el que vivimos, puede que se encuentren un poco escondidas o “dormidas”. Es entonces cuando surge la Filosofía, con el fin de ayudarnos, por medio de investigaciones y de nuestra propia experiencia, a progresar como personas en el mundo tan consumista y superficial en que vivimos actualmente.
Según el libro de texto la filosofía es una actividad que consiste en razonar y reflexionar sobre conceptos e ideas cuyo significado, comúnmente se sobrentiende o se da por descontado. Pero… ¿todos estamos preparados para razonar y reflexionar sobre las respuestas que nos pueden deparar preguntas existenciales o racionales como quiénes somos, de dónde venimos, qué es la verdad y qué es la mentira, por qué lo bueno es bueno y lo malo, malo?, entre otras.
ResponderEliminarLo desconocido puede resultar tentador o aterrador. ‘’Cada persona es un mundo’’ y cada ‘’mundo’’ está movido por unas inquietudes, expectativas y necesidades distintas.
Las necesidades tratan de satisfacer aspectos de la vida del ser humano. Se mueven por las condiciones de vida y los avances de la sociedad. Por eso, las necesidades cambian según el lugar donde te encuentres. Lo que para unos supone un duro trabajo como tener agua potable, para otros es algo tan simple como abrir un grifo y ver agua y agua caer incesantemente.
Esto es una muestra de las desigualdades existentes. Para las sociedades subdesarrolladas es más importante intentar cubrir sus necesidades básicas para subsistir que preguntarse interrogantes filosóficos.
Por esto, podemos diferenciar entre dos tipos de personas. Unas personas más ‘’valientes’’ a las que no le aterran lo que puedan descubrir, con las necesidades básicas cubiertas, inconformistas, movidas por ansias de conocimiento y admiración, de las que florecen preguntas que necesitan ser respondidas. Por otra parte, otro tipo de personas que viven ajenas a saber las respuesta de interrogantes filosóficos como estos por miedo a una decepción de lo que puedan llegar a conocer o simplemente porque la filosofía está en una clasificación posterior a la de las necesidades básicas que no pueden llegar a saciar fácilmente.
Así que, respondiendo a la pregunta inicial ¿necesitamos hoy día un poco de filosofía? Yo creo que depende, depende del ‘’mundo’’ que sea. Todos no necesitamos las mismas cosas para ser feliz y puesto que todas las necesidades no son las mismas, la filosofía considero que es una necesidad secundaria que solo unos pocos son valientes de poder llegar a planteársela.
María José Oteros Tapia - 1º Bach. B
La Filosofía es, en la actualidad, una ciencia indispensable para el ser humano, que busca encontrar respuestas a las cuestiones que se plantea sobre el mundo que le rodea, siempre que no sea un ignorante, ya que entonces, al creer que no carece de ningún conocimiento, no llegará a sorprenderse del mundo y por tanto, a poseer ese afán constante de investigar del que dispone un filósofo.
ResponderEliminarLa filosofía no surge para serle útil a otra cosa ni tampoco por antojo, sino que es completamente inevitable, pues es imposible no hacerse preguntas ya que la naturaleza de nuestro intelecto es pensar, ir más allá de lo parcial, de lo que se nos cuenta, de lo que vivimos y conocemos. De hecho, filosofar es, según Ortega y Gasset, buscar al mundo su integridad.
Que la Filosofía sea el conocimiento de todo lo existente, implica para el filósofo no partir de creencias previas, de no dar nada por sabido anticipadamente.
¿Significa esto entonces que es imposible combinar fe y racionalismo?
Bajo mi punto de vista, es una tarea complicada, pero no imposible. Pienso que en el momento en el que el racionalismo plantee algo a lo que no se le encuentre un sentido lógico, el hombre busca sustentarse en la fe.
Tal vez, al ser la Filosofía algo improbable que quizás no tenga éxito por ser difícil de resolver, se llegue a la conclusión de que no es primariamente necesaria, si bien no sólo nos ayuda a cubrir nuestras inquietudes y curiosidad, sino también a crear una opinión propia y a la hora de la toma de decisiones, acto que se debe llevar a cabo a través del análisis de la situación, observándola desde un punto de vista objetivo, es decir, distanciándonos de ella.
Existen, sin embargo, personas que quizás no llegarían a cuestionarse la necesidad de la Filosofía, tal vez por miedo a que algo llegue a superarles. Es por esta razón por la que algunos individuos prefieren a veces vivir en la ignorancia, atrapados por la rutina y la normalidad, antes que arriesgarse a practicar la Filosofía, que al tener un componente de audacia, puede plantearnos aspectos un tanto desagradables.
En conclusión, y tras barajar dos posibles puntos de vista, defiendo la gran relevancia de la Filosofía en nuestras vidas, no sólo a nivel académico sino también como modo de vida, en el que debe existir una coherencia entre el pensar y el vivir. A veces, las preguntas que nos planteamos sobre el mundo en el que vivimos, puede que se encuentren un poco escondidas o “dormidas”. Es entonces cuando surge la Filosofía, con el fin de ayudarnos, por medio de investigaciones y de nuestra propia experiencia, a progresar como personas en el mundo tan consumista y superficial en que vivimos actualmente.
Elena María Valentín Ortega - 1º Bach. B